Sin reservas para amar mucho menos para sonreír, abajo las barreras ante el miedo levanto la bandera blanca ante la vida las sorpresas, los abrazos y las maravillas.
Recibo los días de sol y recibo los días de lluvia. Agradezco por los besos de amor así como las despedidas que parecen partir el corazón. Éste que aún late, que no renuncia que no pierde la fe. No, no él. Si alguien ha perdido alguna vez la fe, ese soy yo, la mente que quiere controlar jugar al creador y director de absolutamente cada línea y todos los libretos.
Deseo vivir a corazón abierto regresar a estas alas de mi alma la libertad con la que llegaron, para volar, para levantarme sobre el dolor; atesorar las lágrimas así como las risas, aceptar las heridas como parte del camino. Aprender, mirar al cielo y llenarme de todo lo hermoso que este Universo tiene para mi.
A corazón abierto, así es como decido vivir.
Sandy Mejía
Fotografía: Tabitha Brooke
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Esto es parte del más reciente episodio del podcast "Los colores del corazón", puedes escucharlo aquí.